Tras 13 años de la desaparición de Juliana Campoverde, el Estado todavía no encuentra sus restos.
Quito, Ecuador – A 13 años de la desaparición de Juliana Campoverde, el misterio que rodea su caso continúa sin resolverse. La joven, quien fue vista por última vez en el 2012, sigue siendo un símbolo de las víctimas de desapariciones forzadas en Ecuador.
El caso, que en su momento causó conmoción en el país, ha sido ampliamente documentado, pero a pesar de los esfuerzos de las autoridades, sus restos aún no han sido encontrados. Las investigaciones han sido intermitentes, y la familia de Juliana ha luchado incansablemente por encontrar justicia y respuestas sobre su paradero.
La desaparición de Campoverde es parte de un patrón más amplio de desapariciones en el país, en el que activistas, defensores de derechos humanos y personas comunes han sido víctimas de violencia o secuestros forzados. Sin embargo, a pesar del clamor popular, el Estado ha enfrentado fuertes críticas por su aparente incapacidad para resolver estos casos, lo que ha generado desconfianza en las instituciones de seguridad pública.
En los últimos meses, varios grupos de derechos humanos han intensificado sus esfuerzos para exigir una revisión exhaustiva del caso y la creación de políticas más efectivas para evitar futuras desapariciones. Mientras tanto, la familia de Juliana sigue esperando una respuesta, aferrándose a la esperanza de que su ser querido sea encontrado, aunque el tiempo sigue pasando sin avances significativos.