Quito, 15 de octubre del 2025.
Gobierno y comunidades indígenas acuerdan levantar el paro nacional tras 23 días de movilizaciones.
Después de 23 días de movilizaciones y bloqueos en diversas provincias, el gobierno del presidente Daniel Noboa anunció oficialmente el fin del paro nacional, convocado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) en rechazo a la eliminación del subsidio al diésel.
El ministro del Interior, John Reimberg, confirmó la medida este miércoles:
“Hoy se levanta el paro, hoy se abren las vías”, afirmó, destacando que la normalidad progresivamente se restablecerá en las zonas más afectadas.
Contexto de la protesta
La paralización nacional inició el 22 de septiembre de 2025, tras la decisión del gobierno de elevar el precio del galón de diésel de 1,80 a 2,80 dólares, medida que afectó especialmente a sectores agrícolas y de transporte.
Durante las jornadas de movilización se reportaron enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, con denuncias de uso de munición real, bombas lacrimógenas en áreas residenciales y cortes de vías estratégicas, que afectaron la movilidad y el abastecimiento en varias provincias del país.
Acuerdos alcanzados
Tras intensas negociaciones, las autoridades gubernamentales y dirigentes indígenas acordaron:
- Levantar los bloqueos en rutas y carreteras.
- Establecer mesas técnicas territoriales para abordar demandas relacionadas con infraestructura, suministro de agua y precio del combustible.
- Mantener canales de diálogo permanente para prevenir futuras crisis sociales.
Situación actual y perspectivas
Aunque el paro ha concluido oficialmente en varias provincias, persisten tensiones en algunas regiones, y organizaciones de derechos humanos continúan exigiendo justicia por abusos cometidos durante las protestas.
El gobierno reiteró su compromiso con la negociación pacífica y la atención a las necesidades de los sectores más afectados, buscando evitar conflictos similares en el futuro.
Impacto social y económico
El paro dejó un impacto significativo en transporte, comercio y servicios públicos, y generó preocupación por la estabilidad política y económica del país. La pronta apertura de vías permitirá reactivar la actividad económica, aunque se espera que los efectos del paro se sientan en los próximos días.
