Quito, 23 de Julio del 2025.
Ecuador celebra 721 días sin influenza aviar: un hito en la sanidad animal nacional
Ecuador ha alcanzado un logro significativo en la lucha contra la influenza aviar, tras completar 721 días sin registrar casos de esta enfermedad en sus aves de corral. Este importante reconocimiento fue otorgado por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), que certifica al país como libre del virus, un estatus que refuerza la seguridad sanitaria y la competitividad del sector avícola ecuatoriano.
El último brote de influenza aviar ocurrió en julio de 2023 en una granja ubicada en la provincia de Cotopaxi. Desde entonces, el Ministerio de Agricultura y Ganadería, mediante el Servicio Nacional de Calidad Agroalimentaria (Agrocalidad), lideró la implementación de una serie de medidas estrictas y coordinadas para controlar y erradicar la enfermedad. Entre estas acciones destacan:
- La activación de protocolos de bioseguridad reforzada en granjas avícolas, con supervisión constante de los puntos de producción, transporte y comercialización.
- Campañas de vacunación focalizadas en zonas consideradas de riesgo, como Cotopaxi, Tungurahua y Chimborazo, para prevenir nuevos contagios.
- La implementación de un sistema permanente de vigilancia epidemiológica que permite la detección temprana de cualquier señal de alerta.
- Capacitación continua a productores y técnicos en prácticas preventivas y manejo sanitario.
Estas estrategias conjuntas no solo lograron controlar el brote inicial sino que también aseguraron la contención del virus durante un período prolongado, evitando la aparición de nuevos casos. La certificación internacional obtenida no solo destaca la eficacia de las políticas sanitarias nacionales sino que también abre la puerta a mejores oportunidades comerciales para Ecuador, permitiendo la exportación de productos avícolas con mayor aceptación en mercados exigentes por sus normas fitosanitarias.
No obstante, las autoridades sanitarias subrayan la importancia de no bajar la guardia y continuar con las medidas preventivas y el monitoreo constante, ya que la influenza aviar puede resurgir si se descuidan los protocolos. En este sentido, el compromiso con la vigilancia epidemiológica y la cooperación con organismos internacionales es fundamental para garantizar la salud animal y, por ende, la salud pública.
Este reconocimiento consolida a Ecuador como un país que apuesta por la seguridad alimentaria y el desarrollo sostenible del sector agropecuario, contribuyendo además a la estabilidad económica de las comunidades rurales vinculadas a la producción avícola.