Quito, 13 de diciembre del 2025
Pirotecnia: diversión momentánea que puede dejar lesiones para toda la vida.
El uso de pirotecnia, especialmente durante celebraciones festivas, continúa siendo una de las principales causas de quemaduras, amputaciones y lesiones irreversibles, afectando principalmente a niños, adolescentes y adultos jóvenes. A pesar de las campañas de concienciación, los accidentes por manipulación de explosivos artesanales y fuegos artificiales siguen registrándose cada año.
Autoridades de salud y organismos de emergencia advierten que las consecuencias de estos incidentes no solo son físicas, sino también psicológicas y sociales. Las víctimas pueden enfrentar pérdida de extremidades, daño ocular permanente, quemaduras de alto grado y traumas emocionales, lo que impacta de manera directa en su calidad de vida, educación y capacidad laboral.
Los especialistas señalan que muchos de los casos están relacionados con el uso de pirotecnia ilegal o de fabricación casera, que carece de controles de seguridad. Además, la falta de supervisión adulta y el desconocimiento de los riesgos incrementan la probabilidad de accidentes, especialmente en menores de edad.
Desde los servicios de salud se insiste en que la prevención es fundamental. Las autoridades recomiendan evitar el uso de pirotecnia, optar por celebraciones seguras y denunciar la comercialización ilegal de estos productos. También se recuerda que los sistemas de salud enfrentan una alta demanda de atención durante las festividades debido a este tipo de emergencias.
Organismos de socorro reiteran que ninguna tradición justifica poner en riesgo la vida, e instan a la ciudadanía a reflexionar sobre las consecuencias de una práctica que, en segundos, puede provocar daños permanentes e irreparables.