Lunes, 18 de agosto del 2025
Exjefe de inteligencia israelí justifica la muerte de 50.000 palestinos en Gaza en grabación filtrada.
Una grabación recientemente filtrada ha revelado declaraciones del exjefe de Inteligencia Militar de Israel, general Aharon Haliva, en las que sostiene que la muerte de más de 50.000 palestinos en Gaza sería “necesaria” para garantizar la seguridad de futuras generaciones de israelíes.
En el audio, difundido por el canal israelí Channel 12, Haliva afirma que por cada israelí asesinado en los ataques del 7 de octubre de 2023 deberían morir 50 palestinos, sin excluir a menores de edad. “Necesitan una Nakba de vez en cuando para sentir el precio”, expresó, haciendo referencia al desplazamiento masivo de palestinos en 1948 tras la creación del Estado de Israel.
El exjefe de inteligencia subrayó que esta lógica no debe interpretarse como un acto de venganza, sino como un mecanismo de disuasión frente a las generaciones palestinas venideras. Sus palabras coinciden con las cifras oficiales del Ministerio de Salud de Gaza, que reporta más de 55.000 víctimas mortales desde el inicio de la ofensiva israelí tras el 7 de octubre.
Las declaraciones han generado fuerte polémica, pues aluden abiertamente al castigo colectivo de la población civil, una práctica prohibida por el Derecho Internacional Humanitario y los Convenios de Ginebra. Organismos internacionales de derechos humanos consideran este tipo de posturas como una justificación de crímenes de guerra.
Pese a la gravedad de sus palabras, los principales medios israelíes apenas han dado cobertura a la grabación, centrándose en cambio en las críticas de Haliva al primer ministro Benjamín Netanyahu por las fallas en la gestión de inteligencia previas al ataque de Hamás. La omisión mediática ha sido interpretada por analistas como un intento de minimizar la controversia dentro de Israel, aunque el impacto internacional continúa en aumento.
La filtración de este material refuerza las acusaciones de que la estrategia militar israelí en Gaza persigue fines que trascienden la seguridad inmediata, buscando imponer un mensaje generacional a través del sufrimiento masivo de la población palestina.
