Quito, 13 de septiembre del 2025.

Un episodio poco común y que ha causado gran conmoción se registró en las últimas horas, cuando una pareja que se encontraba manteniendo relaciones íntimas dentro de un vehículo terminó precipitándose por un acantilado. El incidente, además de lo inusual, puso en riesgo la vida de los dos ocupantes y generó la movilización inmediata de los equipos de emergencia.

Según reportes preliminares, el automóvil estaba estacionado en una zona elevada y considerada de riesgo. Todo apunta a que, debido a la situación en la que se encontraban, los ocupantes no habrían verificado que el freno de mano estuviera correctamente activado. Esta omisión provocó que el vehículo comenzara a deslizarse lentamente, hasta perder completamente el control y precipitarse varios metros hacia abajo.

Testigos de la zona aseguraron que escucharon ruidos extraños y, al acercarse, lograron observar cómo el vehículo desaparecía en cuestión de segundos por la pendiente. De inmediato alertaron a las autoridades, quienes acudieron con unidades de rescate, ambulancias y personal especializado para atender la emergencia.

Al llegar al lugar, los equipos de socorro encontraron el automóvil en una posición inestable, con daños significativos producto de la caída. La pareja fue rescatada con vida, aunque presentaba múltiples heridas y golpes de consideración. Ambos fueron trasladados de urgencia a un hospital cercano, donde se recuperan bajo supervisión médica.

Los primeros reportes indican que, pese a la gravedad del accidente, no hubo pérdida de vidas humanas, lo que ha sido considerado un hecho afortunado por los socorristas, ya que la caída pudo haber tenido consecuencias fatales.

El insólito accidente rápidamente se difundió en redes sociales y medios locales, generando todo tipo de comentarios, desde expresiones de asombro hasta críticas por la imprudencia de los involucrados.

Las autoridades, por su parte, recordaron a la ciudadanía la importancia de evitar conductas de riesgo en lugares no adecuados para la intimidad y recalcaron la necesidad de mantener siempre las medidas básicas de seguridad al estacionar un vehículo, especialmente en zonas con pendientes o cercanas a barrancos.

Aunque este suceso se convirtió en tema de conversación por la naturaleza particular del accidente, también dejó en evidencia cómo un simple descuido puede poner en peligro la vida de las personas. El hecho sirve como recordatorio de que la seguridad debe estar siempre por encima de cualquier circunstancia.