01 de julio de 2025
El exvicepresidente del Ecuador, Jorge Glas, enfrenta un panorama judicial cada vez más complejo. Con la reciente sentencia emitida por un tribunal de Portoviejo, ya suma cuatro condenas en firme por casos de corrupción, lo que lo convierte en uno de los exfuncionarios públicos con más procesos penales en el país.
La nueva sentencia, relacionada con irregularidades en un contrato para la reconstrucción de escuelas tras el terremoto de 2016 en Manabí, impone a Glas una pena de cinco años de prisión por el delito de peculado. Esta se suma a las ya existentes: seis años por el caso Odebrecht, ocho años por el caso Sobornos, y otra sentencia más en Manabí, también por peculado.
En total, Jorge Glas debe más de USD 1,3 millones al Estado ecuatoriano, entre multas y reparaciones integrales, según lo estipulado por los tribunales. Las cifras podrían aumentar si es hallado culpable en otros procesos judiciales en curso.
Los casos por los que ha sido sentenciado están ligados a graves esquemas de corrupción, incluyendo el cobro de sobornos, contratos amañados y uso indebido de recursos públicos. El caso Odebrecht, en particular, fue uno de los mayores escándalos de corrupción en América Latina y tocó las más altas esferas del poder político en Ecuador.
A pesar de que se encuentra detenido en la cárcel La Roca, en Guayaquil, Glas aún no enfrenta una condena unificada, por lo que el tiempo total que deberá permanecer en prisión aún está en discusión judicial. Su defensa ha anunciado recursos de apelación y acciones internacionales, alegando persecución política.
Mientras tanto, el Estado ecuatoriano continúa con los esfuerzos para recuperar los fondos desviados y enviar un mensaje contundente sobre la lucha contra la impunidad.