Quito, 14 de diciembre del 2025.
Chile decide su futuro en un balotaje presidencial atravesado por una fuerte polarización política.
Chile vive una jornada decisiva con la apertura de las urnas para el balotaje presidencial, en un contexto político profundamente polarizado. Millones de ciudadanos están convocados a elegir al próximo jefe de Estado en una contienda que enfrenta proyectos de país claramente contrapuestos y que ha concentrado la atención tanto a nivel nacional como internacional.
Desde primeras horas de la mañana, los locales de votación comenzaron a recibir a los electores bajo un amplio despliegue logístico y de seguridad. El Servicio Electoral (Servel) informó que el proceso se desarrolla con normalidad, mientras observadores nacionales e internacionales supervisan la transparencia y regularidad de la jornada.
La campaña previa al balotaje estuvo marcada por un intenso debate público, en el que temas como el modelo económico, la desigualdad social, la seguridad, el rol del Estado y el proceso constitucional ocuparon un lugar central. A ello se sumó un clima de alta confrontación discursiva en redes sociales y medios de comunicación, reflejo de la fragmentación política que atraviesa el país.
Analistas coinciden en que la participación ciudadana será un factor clave para definir el resultado, ya que el balotaje no solo enfrenta a dos candidaturas, sino también a visiones antagónicas sobre el rumbo político, social y económico de Chile en los próximos años.
El cierre de las urnas está previsto para la tarde, tras lo cual comenzará el conteo de votos. Se espera que los primeros resultados oficiales se conozcan pocas horas después, en una jornada que podría marcar un punto de inflexión en la historia política reciente del país.