Una visita clave para la agenda bilateral
El 6 de noviembre de 2025, la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, concluyó una visita oficial a Ecuador que marcó un nuevo capítulo en la relación bilateral entre ambos países. Su agenda, centrada en temas de seguridad, migración y lucha contra el crimen organizado, incluyó encuentros de alto nivel con el presidente Daniel Noboa, ministros de Estado y representantes de las Fuerzas Armadas ecuatorianas.
Durante la jornada, Noem recorrió la base aérea de Salinas, en la provincia de Santa Elena, junto al mandatario ecuatoriano, donde analizaron estrategias de cooperación antinarcóticos y de control fronterizo. La funcionaria estadounidense destacó la relevancia del trabajo conjunto, asegurando que Ecuador se consolida como un aliado estratégico para Estados Unidos en la región andina.
Cooperación en seguridad y combate al narcotráfico
Las conversaciones entre Noboa y Noem se centraron en fortalecer los mecanismos de intercambio de información y apoyo técnico en la lucha contra el narcotráfico y las bandas criminales transnacionales. Durante la visita, se presentaron mapas y reportes de inteligencia sobre las principales estructuras delictivas que operan en el país, evidenciando la magnitud del desafío que enfrenta Ecuador en materia de seguridad.
En su cuenta de la red social X, Noem expresó:
“Fue un honor reunirme con el presidente ecuatoriano Daniel Noboa y con los hombres y mujeres de la FAE en la base aérea Eloy Alfaro. Nuestro compromiso es seguir fortaleciendo la cooperación para enfrentar las amenazas comunes”.
El ministro del Interior, John Reimberg, informó que en las últimas semanas se concretaron dos grandes incautaciones —una de 10 toneladas de droga y otra de armamento pesado— con apoyo operativo estadounidense, demostrando la efectividad de esta cooperación.
Salinas y Manta, ejes estratégicos de seguridad regional
La visita de Noem incluyó también un recorrido por la Escuela Superior de Aviación “Cosme Rennella” en Salinas, donde se analizó la posibilidad de establecer un centro de cooperación de Homeland Security. Esta instalación serviría como punto de coordinación regional en la lucha contra delitos transnacionales y emergencias humanitarias.
El ministro de Defensa, Gian Carlo Loffredo, explicó que la base de Salinas es la única en el país con dos pistas de aterrizaje, lo que permite una respuesta rápida ante conflictos o catástrofes naturales. Destacó que su ubicación, en el punto más saliente del Ecuador continental, la convierte en una zona de alto valor estratégico para la seguridad marítima regional.
En tanto, en Manta, Noem y Noboa revisaron el papel del puerto manabita como centro logístico en operaciones conjuntas contra el tráfico de drogas. Allí, el presidente ecuatoriano reiteró su compromiso de fortalecer la cooperación internacional sin comprometer la soberanía nacional.
El debate sobre las bases de cooperación extranjera
El paso de Kristi Noem por Ecuador ocurre en medio de un intenso debate político. El referéndum del 16 de noviembre incluirá una pregunta que busca eliminar la prohibición constitucional de establecer bases militares extranjeras en el país, un tema que divide opiniones.
Aunque el gobierno de Noboa ha evitado hablar de “bases militares”, sí ha mencionado la creación de espacios de cooperación conjunta con Estados Unidos para reforzar la seguridad y la lucha contra el crimen organizado.
Cabe recordar que en 2009, bajo el mandato de Rafael Correa, Washington retiró su personal militar de la base de Manta, poniendo fin a un acuerdo de cooperación que había funcionado durante una década. Desde entonces, las relaciones se han limitado a asistencia técnica y operativa, sin presencia permanente de fuerzas extranjeras.
La reciente visita de Noem reaviva el debate sobre si Ecuador debería permitir nuevamente la presencia de cooperación estadounidense en su territorio, en un contexto donde la seguridad interna se ha convertido en una prioridad nacional.
Un vínculo bilateral en expansión
Esta fue la segunda visita oficial de Kristi Noem a Ecuador en menos de tres meses. En septiembre, el secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, también se reunió con Noboa en Quito para tratar temas de crimen organizado, migración y comercio bilateral.
Estos encuentros reflejan un acercamiento creciente entre ambos gobiernos, impulsado por el deterioro de la seguridad interna ecuatoriana y la necesidad de fortalecer los lazos diplomáticos con sus aliados regionales.
Analistas internacionales señalan que Estados Unidos ve en Ecuador un socio confiable para el control de rutas del narcotráfico en el Pacífico y un actor clave para contener la migración irregular hacia el norte. Por su parte, el gobierno ecuatoriano busca apoyo logístico, tecnológico y financiero para enfrentar la crisis de violencia que afecta al país.
Conclusiones: una alianza en construcción
La visita de Kristi Noem culmina con resultados concretos y expectativas positivas para ambas naciones. Más allá de las discusiones sobre bases o cooperación técnica, lo cierto es que Ecuador y Estados Unidos avanzan hacia una alianza estratégica basada en la confianza y en objetivos comunes.
El fortalecimiento de la seguridad, el combate al narcotráfico y la gestión migratoria se consolidan como ejes de una relación bilateral renovada, donde Ecuador busca reafirmar su papel como puente de cooperación y estabilidad en la región.
