Quito, 15 de septiembre del 2025.
Aumento del diésel impacta transporte y alimentos básicos.
La eliminación del subsidio al diésel en Ecuador ha comenzado a generar preocupación en diversos sectores económicos, ya que expertos advierten que el incremento del combustible podría repercutir en los precios de bienes y servicios esenciales.
El galón de diésel pasó de $1,80 a $2,80, afectando principalmente a transportistas de carga y transporte público. Aunque el Gobierno asegura que las tarifas del transporte urbano no aumentarán de inmediato y ofrecerá compensaciones temporales, los costos de traslado de mercancías ya empiezan a reflejarse en el mercado.
Los productos agrícolas son particularmente vulnerables, ya que su producción y distribución dependen de maquinaria y transporte a diésel. Esto podría traducirse en alzas de precios para hortalizas, granos y otros artículos de la canasta básica, impactando a los consumidores.
El sector pesquero también enfrenta mayores costos operativos debido al combustible necesario para embarcaciones y transporte de pescado. Asimismo, servicios agrícolas y comerciales han comenzado a ajustar sus tarifas, trasladando parcialmente el aumento del diésel a los clientes.
Para contrarrestar estos efectos, el Gobierno implementará un sistema de bandas para estabilizar los precios del combustible y destinará los fondos liberados a programas sociales y productivos. Sin embargo, economistas alertan sobre posibles presiones inflacionarias y la afectación a la rentabilidad de pequeños productores.
Transportistas y comerciantes permanecen atentos a la evolución de los costos, y podrían emprender movilizaciones si los incrementos continúan afectando de manera significativa la economía de los hogares.