El presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, utilizó su discurso en la Asamblea General de las Naciones Unidas este 25 de septiembre de 2025 para lanzar una advertencia contundente: la agresión rusa no se detendrá en las fronteras ucranianas si la comunidad internacional no refuerza su apoyo y compromiso con la defensa de la soberanía. Sus palabras, cargadas de urgencia, estuvieron dirigidas no solo a los países europeos que han respaldado a Kiev desde el inicio de la invasión en 2022, sino también a aquellos que aún se muestran reacios a involucrarse activamente en el conflicto.
“La guerra no es solo nuestra”
Con un tono firme, Zelensky señaló que el Kremlin busca reconfigurar el orden mundial mediante la fuerza, y que permitir avances rusos en Ucrania equivaldría a abrir la puerta a nuevas agresiones en otras regiones. “Hoy somos nosotros, mañana puede ser cualquier nación que se atreva a desafiar las ambiciones imperiales de Moscú”, afirmó ante el pleno de la ONU.
El mandatario insistió en que el costo de la indiferencia sería mucho mayor que el de la solidaridad actual. “La guerra no es solo nuestra, es de todos los que creen en la libertad, la soberanía y la paz duradera”, recalcó.
Llamado a un mayor respaldo militar y político
El presidente ucraniano aprovechó la tribuna internacional para reclamar más apoyo en armamento, financiación y sanciones contra Rusia. Aunque agradeció la asistencia recibida por parte de Estados Unidos, la Unión Europea y otros aliados, advirtió que la guerra se encuentra en un punto crítico.
Según Zelensky, Ucrania necesita sistemas antiaéreos de última generación, mayor suministro de municiones y el fortalecimiento de su capacidad de defensa cibernética. “Cada misil que interceptamos salva decenas de vidas, cada sanción real contra Moscú acorta esta guerra”, puntualizó.
Además, pidió a la ONU reformar los mecanismos de votación en el Consejo de Seguridad, argumentando que Rusia utiliza su derecho al veto para bloquear resoluciones que buscan frenar la guerra. “No se puede permitir que un agresor tenga la llave para frenar las decisiones del mundo entero”, criticó.
Reacciones de la comunidad internacional
El discurso fue recibido con aplausos por parte de los aliados de Kiev, aunque algunos países de América Latina, África y Asia mantuvieron una posición neutral. Mientras que la Unión Europea prometió “seguir al lado de Ucrania hasta el final”, potencias emergentes como India y Brasil volvieron a pedir una solución negociada que evite la prolongación del conflicto.
Estados Unidos, a través del secretario de Estado, reiteró su compromiso con la defensa ucraniana y criticó a Moscú por sus ataques a civiles. En contraste, la delegación rusa rechazó las acusaciones de Zelensky y lo acusó de “victimizarse para recibir más dinero y armas”.
La dimensión global del conflicto
Expertos en geopolítica coinciden en que el mensaje de Zelensky busca ampliar la percepción del conflicto más allá de las fronteras de Ucrania. Para él, la guerra es una prueba de resistencia para el sistema internacional basado en reglas. Si Rusia logra imponerse, interpretan los analistas, quedaría un precedente peligroso para otros países con ambiciones expansionistas.
En ese sentido, la guerra de Ucrania se convierte en un espejo para regiones como el Mar de China Meridional, Medio Oriente o incluso América Latina, donde los equilibrios de poder son frágiles.
Opinión pública dividida
En varios países, la ciudadanía comienza a mostrar fatiga por la guerra y cuestiona el costo económico de seguir apoyando a Kiev. En Europa, sectores políticos populistas han capitalizado ese malestar, pidiendo una reducción del gasto militar y priorizar problemas internos. Zelensky, consciente de esta tendencia, buscó en su discurso conectar con la gente común: “No pedimos compasión, pedimos justicia. No pedimos que luchen por nosotros, pedimos que no nos dejen solos”.
Una batalla también informativa
El presidente ucraniano insistió en que el conflicto no solo se libra en el campo de batalla, sino también en el terreno de la comunicación y la diplomacia. Alertó sobre campañas de desinformación financiadas por Moscú para dividir a la opinión pública mundial y sembrar dudas sobre la legitimidad de Ucrania. “El silencio y la neutralidad también son armas que favorecen al agresor”, dijo.
Conclusión
El discurso de Zelensky en la ONU refuerza la narrativa de que la guerra en Ucrania es más que un conflicto regional: es una prueba para la vigencia del derecho internacional y para la capacidad de la comunidad internacional de contener a un actor que desafía abiertamente las normas globales. El desafío no solo está en el frente militar, sino en la capacidad de los países de mantenerse unidos frente a la presión de la fatiga, la crisis económica y la propaganda.