Diversos sectores sociales han anunciado que se movilizarán en las calles del país durante este mes.
El 3 de julio inició el mes con una protesta en Cuenca. Autoridades de la Universidad de Cuenca, junto a empleados, trabajadores y docentes, se manifestaron en rechazo a la Ley de Integridad Pública, coreando en las calles: “Lo público no se vende, lo público se defiende”.
Por otro lado, para el 11 de julio, Andrés Quishpe, presidente de la UNE, confirmó las movilizaciones que partirán desde la Casa del Maestro, ubicada en las calles César Argüello S64A y Pasaje Oleoducto. Esta manifestación tiene como objetivo principal rechazar la Ley ya mencionada
Además, Nery Padilla, dirigente universitario, informó que el 16 de julio se realizará una movilización nacional de universitarios para expresar su inconformidad frente al abandono de la educación superior y la deuda que el Estado mantiene con las universidades públicas, la cual asciende aproximadamente a 712 millones de dólares.
En tono reflexivo, uno de los dirigentes expresó: “¿Qué estamos esperando? ¿Que más niños y niñas, más profesores, más madres y padres de familia sean asesinados? Declarar en emergencia la educación no implica cerrar los planteles educativos; significa reconocer que es un derecho que requiere recursos”.
La Ley de Integridad Pública tiene por objetivo mejorar y vigilar la gestión pública, entre otros. Sin embargo expertos señalan que esto podría afectar la autonomía universitaria y laboral por el aumento significativo del control estatal.